A raíz del Año Santo Compostelano y tras varios años de formación, desde el pasado mes de julio un grupo de voluntarios está llevando a cabo, a las puertas de la Real Basílica, la labor de acoger a aquellos peregrinos que hasta aquí se acercan.
A diario se está atendiendo a cientos de personas, debido al auge que está protagonizando el Camino Portugués a Santiago. Dicha labor se desarrolla de lunes a domingo, en horario de 17:00 a 21:00 h., ofreciendo a los recién llegados algunas claves y consejos para la visita, repartiendo material didáctico y sellando, en su caso, la credencial del peregrino, además de compartir con ellos un tiempo de conversación amistosa. A tal efecto, se ha acondicionado un antiguo “carrito de los helados”, a fin de habilitarlo como puesto de información y acogida exterior, junto al Cristo del Buen Viaje.